Algunas lagunas del carné por puntos

Sobrepasé en 21 km/h el límite de velocidad permitido y además mantuve una distancia de seguridad inferior a 70 metros. Los agentes de la Policía de Tráfico me obligaron a detener mi vehículo para ponerme una denuncia porque consideraron que infringí el reglamento vial. ¿Cuántos puntos me van a quitar? ¿Tan sólo tres por no mantener la distancia o se incluyen además los otros dos por superar el límite de velocidad? A falta de dos semanas para que entre en vigor el nuevo carné por puntos, todavía hay mucha gente que se pregunta sobre los efectos colaterales que conllevará esta nueva medida.

¿Creen que hay suficiente información? Realmente, existen foros y portales para estar al tanto e informarse de la nueva Ley de circulación, pero si Mahoma no va a la montaña... El caso es que hay muchas lagunas que, a partir del próximo 1 de julio, se multiplicarán notablemente. Y si no, tiempo al tiempo. Al tratarse de un mecanismo de actuación piramidal, es decir, que las personas que pierdan los primeros puntos residirán en la base mientras que en el vértice se encontrarán los que pierdan el carné, existe el grave problema que se sature rápidamente esa pirámide, lo que llegaría un momento en el que el conjunto de la sociedad perdería más puntos que se puedan recuperar. Imagínense cómo se pondrían los servicios públicos de transporte, aunque quizá lo peor es que se incrementaría el número de personas que estarían al volante sin permiso de conducir. No quiero ni pensarlo.

Estamos ante una ley demasiado imprecisa porque ejerce una comparación con las personas que dan positivo en el test de alcoholemia con una que sea pillada in fraganti hablando por su teléfono móvil. Por si fuera poco, para la recuperación del carné se ha contemplado que los conductores se comprometan a realizar cursos de reeducación, cuyos clientes, curiosamente, los proporcionará el propio Estado. Una desagradable situación que tendrán que vivir muchos pero, eso sí, un gran negocio para las autoescuelas.

Las dudas van a aparecer desde el primer instante, eso seguro, y deberán ser resueltas rápidamente porque si no se va a producir un colapso de llamadas preguntando, por ejemplo, a quién le restarán tres puntos en el caso de que un radar capte la instantánea de un vehículo a velocidad excesiva que, curiosamente, la titularidad está compartida por una pareja . En ese caso, ¿se repartirán los puntos? ¿Priorizará uno en detrimento del otro? ¿Cómo sabrán quién era la persona que conducía? Desde la Asociación de Accidentología Vial intentan presionar a las autoridades públicas a que recapaciten sobre la estrategia comunicativa que desde el Gobierno se está impulsando para informar a los ciudadanos. Eso sí, ya nos iremos enterando cuando lo suframos en nuestras propias carnes.

José M. Sánchez "Daze"